Izquierdo asiste a la salida de la VI Carrera Solidaria por la Salud Mental organizada por Fundación Manantial.
La Carrera por la Salud Mental reúne cada año a más de 1.000 personas.
Su objetivo es la plena integración de las personas que padecen un trastorno mental grave.
En la región hay 300.000 personas que tienen alguna discapacidad reconocida, de las cuales el 24,3% padecen una enfermedad mental
La Comunidad de Madrid atendió el pasado año a 8.293 personas con enfermedad mental grave y duradera, lo que supone un incremento del 1,46% respecto a 2015. En la región hay 300.000 personas que tienen alguna discapacidad reconocida, de las cuales el 24,3% padecen una enfermedad mental.
Así lo ha señalado el consejero de Políticas Sociales y Familia, Carlos Izquierdo, en la VI Carrera Solidaria por la Salud Mental, que reúne cada año a más de 1.000 personas y que tiene como objetivo dar visibilidad y apoyar la inclusión de las personas que padecen un trastorno mental grave. “Gracias a esta gran iniciativa de la Fundación Manantial, y a que cada año más personas hacen posible que se realice con más ilusión y ganas, la repercusión que llega a tener es enorme”, ha afirmado Izquierdo.
El Gobierno regional apoya todas las acciones que, como esta, buscan dar visibilidad y apoyar la inclusión de las personas con problemas de salud mental y sus familias rompiendo tabúes y compartiendo lugares donde lo importante no es el diagnóstico, sino los intereses comunes de ocio y deporte entre las personas que participan en este evento deportivo.
150 nuevas plazas de enfermedad mental
El Gobierno regional tiene un especial compromiso con las personas con discapacidad, por ello la Comunidad de Madrid es la única comunidad autónoma que presta atención gratuita a la discapacidad. Además, el año pasado se aumentaron en 150 las plazas de enfermedad mental, hasta llegar a las 6.214 en los 204 centros y recursos, donde trabajan 1.300 profesionales.
“La Comunidad de Madrid cuenta con un modelo comunitario, gratuito y de referencia en la atención social a personas con enfermedad mental grave y duradera. Por eso, lo que buscamos es favorecer la autonomía, la inclusión social y la calidad de vida de las personas con trastorno mental grave y sus familias”, ha afirmado Izquierdo.
Una de las metas de la red de personas con discapacidad es favorecer el acceso al mercado de trabajo de las personas con enfermedad mental y, para ello, la Comunidad cuenta con 22 centros de rehabilitación laboral, donde se atendió el pasado año a más de 1.500 personas. Estos centros están diseñados específicamente para mejorar la preparación en el desempeño de un empleo de aquellas personas que necesitan adquirir o recuperar habilidades perdidas a causa de la enfermedad.