El viceconsejero de Economía e Innovación, Javier Ruiz, ha presentado la Campaña de Seguridad en las instalaciones de gas en la región.
Para evitar riesgos es necesario un mantenimiento adecuado de las rejillas de ventilación y de los conductos de evacuación de humos.
Los Centros de Atención de Urgencias atienden las llamadas de los ciudadanos para comunicar incidencias de seguridad con el gas
El viceconsejero de Economía e Innovación, Javier Ruiz, ha visitado el Centro de Control de Atención a Urgencias de Gas Natural Madrid, donde ha presentado la Campaña de Seguridad en las instalaciones de gas en la Comunidad de Madrid, cuyo objetivo es el de ofrecer a los ciudadanos una serie de consejos prácticos para utilizar con seguridad el gas en casa y evitar así posibles accidentes.
Vigilar que la combustión sea correcta, evitar que las rejillas de ventilación y el tubo de salida de gases queden obstruidos y realizar un correcto mantenimiento de la caldera cada cinco años son algunos de los principales consejos dirigidos a los usuarios de gas, ya que son las principales causas de incidentes. Además, es importante saber que, en caso de notar olor a gas, el protocolo de seguridad a seguir pasa por abrir las ventanas, evitar la producción de chispas, no accionar interruptores y llamar al servicio de urgencias de la empresa suministradora.
Para realizar esta Campaña de Seguridad, la Comunidad de Madrid ha contado con la colaboración de las empresas Gas Natural, Repsol, Madrileña Red de Gas, Redexigas, EDP Energía, la Asociación Española del Gas (SEDIGAS) y la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (Agremia).
Javier Ruiz ha señalado que en la Comunidad hay más de dos millones de usuarios de gas en el sector doméstico, que cubre la mitad del consumo energético de las familias madrileñas, y que por ello se sigue una estrategia de fomento del uso de este tipo de energía, menos contaminante que otras como el gasóleo o el carbón, siempre con la imprescindible seguridad.
Revisar cada cinco años las instalaciones de gas
Las instalaciones conectadas a redes de gas requieren de un control periódico cada cinco años y corresponde a la compañía distribuidora el aviso al usuario de la realización de la inspección, abonando el precio de la misma en la factura de suministro de gas o bien a petición del usuario a una empresa instaladora, en cuyo caso el precio es libre y es recomendable solicitar un presupuesto previo.
Las instalaciones que se alimentan desde depósitos individuales o mediante botellas de butano o propano deben pasar, también cada cinco años, una revisión periódica, aunque en este caso será el titular o usuario el que tendrá que contratar con una empresa instaladora de gas habilitada.
“La seguridad empieza por las buenas prácticas de los usuarios, aunque la reglamentación vigente impone obligaciones a las compañías suministradoras. En cualquier caso, ningún mantenimiento, inspección o control de la administración o de las compañías de gas puede reemplazar la responsabilidad de los usuarios para conseguir que los gases combustibles se utilicen con la máxima seguridad”, ha destacado el viceconsejero.
Por ello, la Comunidad de Madrid trabaja con las empresas del sector a través de campañas de comunicación y campañas de inspección de instalaciones, lo que ha contribuido a la reducción del índice de siniestralidad de estas instalaciones, convirtiéndolo en uno de los más bajos de España.
Centros de atención de urgencias
El viceconsejero de Economía e Innovación ha destacado la labor de los centros de atención de urgencias de las compañías distribuidoras que atienden de forma gratuita a los usuarios en caso de incidencias de seguridad con los gases. Están coordinados con los servicios de emergencia de la Comunidad de Madrid, para lo que existen protocolos de comunicación permanente con el 112, con el objetivo de asegurar la eficacia del servicio.