Esta afirmación se hace en un comunicado firmado por el obispo Joe Vásquez, presidente del Comité de Migración de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos
Los obispos de Estados Unidos señalaron que la construcción del muro prometido por Trump en la frontera con México “aumentará significativamente la detención y deportación de inmigrantes” y hará “caso omiso de la sentencia de cumplimiento de la ley estatal y local sobre la mejor manera de proteger a sus comunidades”.
Lo indicaron este miércoles en un comunicado en su web, en el cual recuerdan que la frontera entre Estados Unidos y México abarca aproximadamente unos 3.200 kilómetros y que ya hay unos 1.000 kilómetros de muro construidos durante la administración de George W. Bush.
El obispo Joe Vásquez, presidente del Comité de Migración y Obispo de la Diócesis de Austin, declaró: “Estoy descorazonado porque el presidente ha dado prioridad a construir un muro en nuestra frontera con México” y porque “esta acción pondrá innecesariamente en peligro las vidas de inmigrantes”.
“La construcción de ese muro solo hará que los migrantes, especialmente las mujeres y niños, sean más vulnerables a los traficantes y a los contrabandistas”dijo. Y añadió que “la construcción de un muro de tales dimensiones desestabiliza a muchas comunidades vivas y muy bien conectadas entre ellas que viven en paz a lo largo de la frontera”.
“En lugar construir ahora muros, mis hermanos obispos y yo continuaremos a seguir el ejemplo de Francisco. Nosotros buscaremos construir puentes entre las personas, los puentes que nos permiten romper las barreras de la exclusión y la explotación”, indicó.
Consideró además que “el anunciado incremento de espacio de detención para inmigrantes y las actividades de control de la inmigración es alarmante”, porque “desgarrará a familias y provocará miedo y pánico en las comunidades”.
El presidente del Comité de Migración indicó: “Respetamos el derecho de nuestro gobierno federal de controlar nuestras fronteras y garantizar la seguridad para todos los estadounidenses, pero no creemos que una acción en gran escala para la detención de inmigrantes y el creciente intensivo uso de control en comunidades inmigrantes sea el camino para obtener esas metas”.
“Seguiremos –concluye el comunicado– apoyando y solidarizándonos con las familias inmigrantes. Recordamos a nuestras comunidades y a nuestra nación, que estas familias tienen un valor intrínseco como hijos de Dios. Y a todos los afectados por la decisión de hoy, de que estamos aquí para caminar con ellos y acompañarlos en esta ocasión”.
Sobre el mismo tema, desde España el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), José María Gil Tamayo, señaló que “Las civilizaciones que se honran hacen puentes, no muros”, tras el anuncio de la construcción de la valla. Lo dijo este miércoles a Europa Press al término del acto de entrega de los Premios ¡Bravo! en la sede de la Conferencia Episcopal Española.
Sergio Mora
Imagen: El comunicado de los obispos de Estados Unidos