La 102 Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de México difunde el mensaje “Planificar la siembra en la esperanza de una buena cosecha”
La 102 Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de México concluyó con una conferencia de prensa y la difusión de un mensaje.
El cardenal José Francisco Robles Ortega, presidente de la CEM, dijo que el tema de las migraciones ha sido uno de los ejes abordados en la reunión semestral, que esta vez tuvo el objetivo iniciar la construcción del Proyecto Global de Pastoral; Agenda 2031.
Sobre el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, los obispos indicaron que el gobierno de México debe intensificar el diálogo Washington, para evitar escenarios negativos que afecten a la sociedad y a los migrantes.
El mensaje publicado por los obispos señala que en el contexto de la conmemoración del V Centenario de las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el año 2031, quieren responder desde la fe a la realidad que desafía a la sociedad y a la Iglesia en México, impulsando nuevos procesos evangelizadores.
En el mensaje que lleva por título “Planificar la siembra en la esperanza de una buena cosecha” reconocen la “grave situación que enfrenta nuestro país” y aseguran estar convencidos “que tanto el Gobierno como la ciudadanía hemos de superar con el diálogo las diferencias que han marcado nuestra historia y los conflictos actuales”.
“No se puede gobernar sin escuchar a los ciudadanos” indican y que desean “repensar y construir una historia más reconciliada y reconciliadora”. Porque “nuestra vocación exige anunciar la verdad en Cristo sobre la persona y el mundo, sin pretender imponerla, sino ofreciéndola como un servicio a nuestro pueblo”.
De esta manera, indican los obispos “buscamos ser una Iglesia en salida, de puertas abiertas, dialogante, misericordiosa; que acoja, atienda y acompañe a la persona, y que sea pobre con y para los más pobres”.
MENSAJE DE LOS OBISPOS DE MÉXICOEN SU CII ASAMBLEA ORDINARIA
“Planificar la siembra en la esperanza de una buena cosecha”
Saludamos a todas las personas de buena voluntad que están abiertas a la esperanza de que juntos podemos construir una Patria más justa, reconciliada y en paz.
Somos conscientes de los amplios cambios culturales de nuestra época y deseamos asumirlos desde una comprometida y conjunta acción pastoral, enfrentando con responsabilidad sus posibilidades, peligros, retos y desafíos presentes y futuros.
Nos hemos reunido para orar, reflexionar y redefinir nuestro caminar, a través de la elaboración y puesta en marcha de un “serio y cualificado Proyecto Pastoral”, como nos lo ha urgido el Papa Francisco en su reciente visita, expresado con un lenguaje claro y honesto que comprometa cada día más nuestra vida y misión episcopal, ante la grave situación que enfrenta nuestra País.
Con este “Proyecto Global de Pastoral” queremos, en el contexto de la conmemoración del V Centenario de las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el año 2031, y en el contexto del segundo milenio del Misterio de la Redención en el 2033, profundizar y responder desde la fe, a la realidad que desafía a nuestra sociedad y a la Iglesia en México, impulsando nuevos procesos evangelizadores.
Así mismo, con motivo del 1er Centenario de la Constitución Mexicana que pronto celebraremos, estamos convencidos que tanto el Gobierno como la ciudadanía hemos de superar con el diálogo las diferencias que han marcado nuestra historia y los conflictos actuales. No se puede gobernar sin escuchar a los ciudadanos. Junto con la sociedad, queremos repensar y construir una historia más reconciliada y reconciliadora.
Nuestra vocación exige anunciar la Verdad en Cristo sobre la persona y el mundo, sin pretender imponerla, sino ofreciéndola como un servicio a nuestro pueblo. Estamos dispuestos a escuchar las distintas voces de la sociedad mexicana, con humildad y apertura, y deseamos que este diálogo sea permanente, propositivo y respetuoso.
De esta manera, buscamos ser una Iglesia en salida, de puertas abiertas, dialogante, misericordiosa; que acoja, atienda y acompañe a la persona, y que sea pobre con y para los más pobres.
Este Proyecto Global de Pastoral, a realizarse en los próximos años, lo viviremos inspirados en la misericordia del Padre que se nos manifiesta en Jesús, y bajo la mirada tierna de Santa María de Guadalupe “que custodia los más altos deseos de nuestro pueblo, sus más recónditas esperanzas, sus alegrías y sus lágrimas”, y con el compromiso de todos los pastores y laicos de proyectar nuestra fe, acompañando especialmente a las familias y a los jóvenes y colaborando en la construcción de una nueva y mejor sociedad.
Lago de Guadalupe, 10 de noviembre de 2016