Entrevista a Foad Aodi, de Unidos para Unir, que sigue a la de ‘Musulmanes en las iglesias’ tras el asesinato de un sacerdote en Francia
(ZENIT – Roma).- El movimiento internacional ‘Unidos para Unir’, pidió a las mezquitas de Italia que abran sus puertas a los visitadores cristianos en la tarde del 11 de septiembre próximo, fecha del 15 aniversario del atentado del 2001 a las Torres gemelas de Nueva York, en una iniciativa llamada ‘Cristianos en las mezquitas’.
El presidente de la ‘Comunidad árabe en Italia’ y de ‘Unidos para unir’, Foad Aodi, uno de los principales organizadores conversando con ZENIT indicó que “con este gesto se quiere dar una respuesta clara a la página negra de la historia mundial que fue el atentado del 11 de septiembre”, “para archivar los gestos de quien hacen la guerra a la religión, porque lo sucedido no es una guerra de religiones”.
Se trata, dijo de “superar el miedo la religión musulmana yendo a las mezquitas” y señaló su deseo de que el papa Francisco les ayude porque reforzaría el mensaje. Precisó que están contactando a los canales debidos para llegar a él, así como a los obispos italianos, movimientos y organizaciones varias.
“Así como hemos hechos nuestra parte en la iniciativa ‘Musulmanes en las Iglesias’ nos esperamos una respuesta bastante fuerte por parte del cardenal Bagnasco para dar a un mensaje mundial en este momento”. Y esperamos que “los obispos, religiosos, instituciones italianas, presidentes de regiones, municipalidades y ciudadanos estén con nosotros”.
La propuesta llega después de la iniciativa lanzada en diversos países de Europa la cual invitó a los fieles musulmanes a acercarse a la misa dominical del 31 de julio en las iglesias católicas para recordar y homenajear al sacerdote Jacques Hamel, asesinado por dos fanáticos islámicos el mes pasado en Normandía.
Añadió que “las mezquitas que no adherirán a la iniciativa responderán directamente a sus poblaciones” y que “nosotros volveremos pública la lista de las estructuras que abrirán las puertas, pero también a las que no lo harán. La respuesta a este llamado será la prueba o menos para los imán y sobre la integración en Italia” porque no es admisible que haya musulmanes “que quieran seguir pensando como ciudadanos extranjeros, siguiendo solamente los dictámenes de sus países de origen”.
Precisó además que “la jornada de apertura de las mezquitas no será una ocasión de oración sino de visita en la que los expertos de religión islámica podrán explicar y responder a las eventuales preguntas. La idea es favorecer el diálogo y abatir prejuicios”.
Una iniciativa indudablemente interesante, cuyo apoyo público y oficial por parte del Vaticano dependerá mucho de la adhesión que encuentre entre los musulmanes del en Italia.
Cuando fue construida en 1995 la primera mezquita en Roma, la más grande de Europa, con su centro cultural, la Santa Sede no se opuso y consideró que era un derecho de quienes practican la religión musulmana. Entretanto pidió reciprocidad, o sea que en los países musulmanes los cristianos puedan construir iglesias y profesar libremente y públicamente su fe.
Sergio Mora